CIEN MILLONES DE DOLARES PARA EL REY DE LOS BANDIDOS
MARIO CASTAÑO MOLINA conocido como el chopo o el rey de los bandidos.
Un seguimiento minucioso, de los movimientos de Gerardo Moncada adinerado narcotraficante de Medellín, dejó claro que se estaba tomando en serio las ideas de su hermano William, a Pablo hay que tenerlo pobre para que no joda. Kiko como le llamaban se reunía frecuentemente con un sujeto conocido como el canario, trabajador de los hermanos Rodríguez orejuela,una de esas reuniones,en el hotel mi Rey de la Pintada Antioquia, fueron reportadas a Mario castaño Molina, el más temido jefe de sicarios del cartel de Medellín, su fama era tal que el mismo Escobar, le llamaba el Rey de los bandidos, y este a su vez decía que el Pablo Escobar de la calle era él y realmente lo era. Pablo al momento de su entrega había acordado con ellos que él lo hacía para sanearlos a todos, pero que quienes quedaran afuera contribuirían con plata.
A inicios de 1992, el Negro Galeano había visitado la cárcel. Las rutas exitosas me las debe a mí, le dijo Pablo haciéndole una advertencia. Estos le escribieron una carta donde se comprometían a entregar 500.000 dólares mensuales pero le pedían mayor autonomía. También se habían opuesto a la decisión adoptada por Pablo de secuestrar para financiar la guerra.
Chopo aseguraba que esta familia caminaba hacia la traición. El instinto de guerrero de Pablo se alertó. Amarraron a uno de los hombres de Moncada y le pillaron una agenda con teléfonos de Cali. Interceptaron sus teléfonos: Los estamos bloqueando económicamente, le decían al contacto con Cali.
MARIO CASTAÑO MOLINA conocido como el chopo o el rey de los bandidos.
Con la amenaza de una guerra inminente, Moncada habría acordado pagar 100 millones de pesos, según una fuente, Chopo haciéndole honor a su apodo tomó este dinero sin decir nada a Pablo, la suerte estaría de su lado, pues estas familias le habían dicho a Escobar que estaban mal económicamente.[the_ad id=»4035″]
Y al poco tiempo ocurrió el robo de una millonaria caleta En un barrio de Itagüí, la tierra de los Galeano, una joven novia de un bandido de barrio, que ya tenia las mismas mañas del novio empieza a aparecer en las rumbas con billetes de veinte y cincuenta dólares. Le cuenta a sus amigos, bandidos de barrio, mi papá tiene una caleta con dólares ni la hijueputa, que en su casa guardan una plata y que ella aprovecha cuando su papá los saca al sol para robarse algunos. Los bandidos le cuentan al Tití un hombre de Mario Castaño y deciden asaltar la casa, se encuentran con el tesoro de Alí Baba: una pieza llena de dólares. ¡Se me apareció la virgen! exclamo Tití, Y aunque se llevan toda la caleta saben que se han metido con un pez gordo.
El Negro Galeano llama a los hombres de Pablo para que le ayuden a recuperar el botín. Está seguro de que por unos millones moverían cielo y tierra para encontrar su tesoro. Tranquilo, allí le mando a Boliqueso que le ayuda, le dijo Mario, Fernando llamó también a alias Arete, que paso de jefe de sicarios a traqueto, pues Pablo le delego el manejo de la ruta la Fania junto con Moncada y Galeano que manejaban la oficina de Itagüí, pero la plata seguía perdida, Chopo se reunió con sus hombres de confianza, Tití, Juan caca, Misterio, Ñangas, boliqueso, El primo y otros encargados de la seguridad: Señores se Robaron 20 grandes y no aparecen por ningún lado, ya están apretando mucha gente y habrán muchos muertos, Entonces tití le Respondió sabe que hermano yo tengo esa plata. Al Chopo se le abren los ojos al ver veinte millones de dólares más entre los cuales hay billetes pudriéndose a los que deben echarles talco para despegarlos.
LA TRAICIÓN Enterado el 3 de julio, Galeano sube a La Catedral a reclamar. También subió el Arete, Ya sabemos dónde está la plata, se la vamos a devolver, pero estamos en la inmunda, colabórenos con la tercera parte, le propuso Pablo. Y el Negro, que por años había sido sumiso frente al Patrón, por primera vez le habla duro. Ni por el putas, me devuelven hasta el último centavo, le dice en tono desafiante. Entonces le queda decomisada, le replica Pablo y de inmediato lo encañonan. Pablo, que sabe que es el momento de mover fichas y neutralizar los peligros que lo acechan, manda que suban a Kiko.[the_ad id=»4052″]
Sus bandidos, queriendo sangre, lo animan ¡Hágale, Patrón! Los llevan a un sótano donde tienen una pequeña cárcel. Moncada y Galeano piensan que es pesadilla, que todo pasará pronto. No conciben que Pablo, el hombre con el que han compartido largos años de negocios y luchas, con el que han sido incondicionales, les pague con la muerte. Al momento siguiente, recordando cómo el Patrón ha eliminado en el pasado a sus amigos, piensan que esos cuervos que ellos ayudaron a criar irremediablemente les sacaron los ojos y que para justificarlo repetirán a los cuatro vientos que ellos son unos traidores.
Después de que Pablo da la orden de ejecución y los llevan detenidos a una cárcel dentro de la cárcel, le informan que afuera están varios funcionarios de la Procuraduría. Arete entra apresurado, No Patrón, esta vuelta está caída, no mate esos manes, Pablo lo piensa unos segundos. Corra, dígale a aquellos manes que paren, Cuando va llegando al sitio siente los disparos. Pablo se confunde por un momento, pero reacciona con vigor: Dígale a los de la Procuraduría que si entran les damos bala. Ahora sabe que debe enfrentar a los miembros de ambas familias. Y Ordena la cacería: Que no quede ninguno vivo, le dice al Chopo.
En menos de 96 horas Chopo, comanche, el zarco, tyson, cuchilla, Arete y otros eliminan a más de quince jefes y mandos medios. Retienen y matan a sus hermanos, Mario Galeano y William Moncada; amarran a los contadores y a los testaferros para que firmen los traspasos de las escrituras de las propiedades. Rafael Galeano negocia para que le devuelvan los cadáveres de sus hermanos. Un narco que colaboró con la fiscalía dijo de Chopo: La única manera que este sujeto tenia de hacer mucha plata era con la Guerra, El Rey de los bandidos, quizás tomó sus millones, pero además había iniciado una nueva Guerra, que también seria la ultima. [the_ad id=»4354″]
El día que finalmente el bloque de búsqueda, lo ubica y da de baja en el edificio Bancoquia de Medellín, la primicia fue cubierta por el periodista Mario correa, quien tenia tiempo escondido allí, pues el chopo lo buscaba para matarlo, pero ninguno de los dos se reconoció.
A chopo un hombre ambicioso, siempre le gusto la buena vida de rico y aun en esos últimos días daba esa impresión, incluso, asistía al cine con su novia. Correa recuerda, El comandante me dijo que habían abatido al famoso chopo cuando lo vi muerto supe que ese hombre con apariencia de rico, al que con frecuencia me encontraba en el ascensor, con Ropa de deportista que me saludaba y sonreía amablemente,era el Chopo a quien llamaban el Rey de los bandidos.